Escucho al mar gritar revolución
miro al cielo abriéndose a la libertad
reclamando una nueva constitución
y la tierra dolida se parte por la mitad.
Es hora de dejarse de arrollidar
y levantar la cabeza, para ver con claridad
las muertes, las personas sin hogar
el hambre, la miseria que hay que erradicar.
Es hora de dejar de llorar
que muchas gotas de sangre inocente se vierten,
es hora de ponerse a luchar
mientras los lloros en gritos de lucha se convierten.
Quiero tener la sensación de volar,
¡con otra constitución que nos lleve a la felicidad!,
quiero ver a todo el mundo contento cantar,
¡mientras caminan hacia su libertad!.
Encarna López Gil